Era el tiempo de López Portilo (el último presidente de la revolución mexicana según él mismo); el tiempo del boom petrolero y de la debacle de los precios.
Todos los fines de semana viajaba de mi familiar reynosa al monterrey escolar. Cada vuelta la misma historia, los aduanales representaban una fauna muy curiosa de la que no podías prever reacciones. A veces le quitaban a los estudiantes hasta la comida de los supermercados gringos que era mucho más barata y mejor. Como parte de esa historia de capítulos semanales, veía el avance de la construcción de la refinería de Cadereyta (la pura barda era impresionante).
En esa misma época, recuerdo un viaje en avión con mi padre (no tengo memoria suficiente de donde a donde, pero fue largo, de varias horas) él tenía un manuscrito (pulcro, en hojas de papel cebolla) que era un texto sobre la historia del petróleo en México. Era un trabajo por editarse que tenía dos particularidades.
La primera. Era una obra de fernando benitez (el autor de los indios mexicanos) que era amigo del ingeniero jorge díaz serrano. Seguralemnte más que amigo y maestro, del que pudo ser... pero no fue.
La segunda peculiaridad es que sería editado de manera especial. No en papel sino "sus hojas" serían de un material derivado de petróleo.
Ahora, estamos convocados a discutir la reforma energética... lo malo es que el espeectro se remite sólo a los sucesos del 38, sin pensar en el siglo 21 parece que volvimos a reducir la historia y a perder la perspectiva del presente. Para qué hablar de prospectiva, no es nuestra costumbre hablar pensar en ella. El futuro lo discutiremos cunado estemos en él.
El optimismo de lo que podamos lograr como país y como sociedad en este tema, tiene más nubarrones que luces. No hay acuerdo para ponernos de acuerdo. ¿Ese es el México que podemos tener?
Para leer algo interesante sobre el asunto, de otra pluma mexicana.
http://www.jornada.unam.mx/2008/04/15/index.php?section=opinion&article=008a1pol
"Es la historia, y no la histeria, la que nos proporciona razones más que suficientes para desconfiar de nuestra asociación con cualquier empresa extranjera".
Fernando del Paso
y de ahí para adelante...
Durante el viaje, leí el texto de don fernando benitez, lamentablemente tampoco tengo memoria suficiente para evocar su contenido... lo que si se es que habría sido un honor trabajar en su edición, aun cuando la frustración del ingeniero sonorense haya sido casi tan dolorosa como la del otro sonorense de Magdalena
