la prospectiva se puso de moda hace muy poco tiempo.
Su utilidad es incuestionable. La posibilidad de "estudiar" el futuro para comprenderlo mejor es imprescindible en tiempos de cambios rápidos.
La modernidad ha hecho que, justamente, el futuro llegue más violento, intempestivo y pleno de estupefacción.
"estamos llamados a ser arquitectos del futuro, no sus víctimas" afirmaba a finales del siglo pasado un futurólogo en un reporte de Pew Internet & American Life Proyect que decía también... "aquellos que meditan sobre el futuro, están mejor preparados para influirlo".
Creo que el lapso entre el presente y "el tiempo necesario para olvidar el pasado" también se estrecha. Olvidamos más rápido ante la velocidad y el cúmulo de nueva información. (la de ocho de hoy, pasará a las interiores en unos cuantos días para recorrer todo el periódico y salir cuando --necesariamente-- ya tendremos otra de ocho que seguirá la misma ruta).
En el 2006, recuerdo a los tres candidatos a la presidencia ofrecer precios más bajos en energéticos. Ni quien se acuerde.
Hace apenas seis meses, me sorprendió la falta de "prospectiva" del gobierno federal, pero también de los "analistas" para pronosticar la crisis alimentaria, lo cual nos obligó --en plena época neoliberal-- a acogernos nuevamente a los subsidios. Nos obligó a poner en marcha "programas emergentes". (emergente pues no la esperabamos, el martes obama en el debate dijo que los retos más fuertes que tendrá como presidente de eeuu, serán los "unespected")
Esta crisis financiera era inminente solo para algunos "marginados" cuya opinión no pesa.
Los nuevos programas emergentes anticrisis deberían acusar un "futuro promisorio" para la prospectiva, para la tarea de "prospectar" dicen los mismos que usan accesar, en lugar de acceder. Es evidente que hasta ahora no ha resultado... y que hay que leer y producir más "futurología" de la sistemática.
El ejercicio ahora implica "imaginar" escenarios...
por ejemplo: el que nos llevará una generación "limpiar" la economía global; se dice que la recesión será larga, severa y alcanzará --incluso-- a "la econmía real"...
otro indica que sólo unos cuantos pobres serán más pobres... pero sin "consecuencias" para el sistema, que en apariencia basta con modificar sus dogmas (aunque hay otros que dicen que el sistema colapsó for ever)...
uno más, sería que México (a pesar de ser de las naciones emergentes, las que por supuesto podrían pagar los platos rotos) hará de esta crisis una oportunidad... pero para que los funcionarios federales sigan diciendo tonteras y en la más impune de las irresponsabilidades...
y otro escenario de prospectiva de muy corto plazo, es que el paquete económico de 2009 que proyecta "ajustes" y efectos sólo en la tasa de crecimiento --a pesar de estar en el terreno de los "if" y el optimismo-- tenga la suerte de verse cumplido.
El remate de marcela gómez zalce es puntual y águdo...
"A estas alturas del partido, Felipe debe reconsiderar y/o recapacitar los simpáticos pronósticos, diagnósticos, estrategias y planes que le están presentando muchos de sus colaboradores más cercanos sobre todo en temas de seguridad nacional... donde le faltan algunos emocionantes sustos. Las medidas para enfrentar lo que está fuera del control presidencial, como lo es la situación económica mundial, debieron ser aplicadas a tiempo. Señales hubo de sobra. De expertos, analistas y parajodas de la vida, desde el mismo Banco de México. El problema es que las grillitas, los celos, la estupidez, la ignorancia, el control de cotos, los deseos de venganza... el miedo y la desmedida ambición de este famoso Gymboree han marcado la agenda presidencial de desaciertos, impericias, ocurrencias, torpezas y muy malas decisiones. Y ayer, my friend, llegó la primera factura".
Milenio Diario
Autor: Marcela Gómez Zalce
Género: Columna
Página: 16
saludos
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